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En el marco de una serie de clases dedicada a la problemática de la personalidad de estructura autoritaria, alumnos del último año del bachillerato de una escuela comprensiva de la ciudad de Colonia analizan la psicología de un victimario. El análisis se centra en el médico Friedrich Mennecke, quien fue uno de los protagonistas de la Acción T 4, el programa para la destrucción "de la vida inferior". Otra temática tratada en clase fue la "reinserción" de los victimarios en la sociedad alemana de la posguerra.
La confrontación con los victimarios responsables de los crímenes nacionalsocialistas sigue signada en el presente, desde mi punto de vista, por la personalización ("Hitler y sus verdugos"), la demonización ("la bestia de los campos de concentración"), el insuficiente análisis de los factores sociopolíticos y la falta de consideración de los factores que hacen a la socialización.
Las biografías de los victimarios
En los últimos años, un creciente número de investigaciones sobre el nazismo se centra en las biografías de los victimarios; es probable que esto se deba a que se busca transmitir las historias de ciertas personalidades y su participación en los crímenes del nazismo sobre la base de algunos ejemplos que todavía pueden documentarse. Resultaron precursores los trabajos de Ernst Klee y Götz Aly, publicados en la década del ochenta, como así también los proyectos para investigar biografías de victimarios promovidos por el Instituto de Investigación Social de Hamburgo. A los docentes les corresponde la tarea de aprovechar esos enfoques para el trabajo escolar. Tan sólo desde hace unos pocos años, contamos con materiales diferenciados para tratar en clase el tema de la "eutanasia en el estado nacionalsocialista".
El caso de Mennecke, médico de la "eutanasia", me brindó la posibilidad de abordar, junto a los alumnos de un curso básico de pedagogía del 13° año escolar, la biografía y las características psicológicas de un genocida nazi y a la vez introducir la temática de la "eutanasia", bastante desconocida entre los jóvenes.
¿Quién fue el doctor F. Mennecke?
Mennecke murió antes del juicio en segunda instancia. De no haberse conservado sus cartas, probablemente se habría presentado como un filántropo o un combatiente de la resistencia, con la misma elocuencia que muchos de sus colegas médicos. En cambio, sus cartas muestran la interioridad de un ciudadano "normal" que se transforma en genocida como si nada, sin conflictos interiores ni dinámica emocional
Yo mismo estaba intrigado y también algo inseguro: no sabía si mis alumnos iban a interesarse en estudiar junto conmigo el caso del médico F. Mennecke para indagar en la psicología de alguien que no parecía sino un esposo decente y correcto en tiempos de la República de Weimar y del fascismo.
En cursos anteriores había intentado ilustrar, basándome en el caso de Rudolf Höss, cómo los seres humanos podían transformarse en genocidas que ejecutaban la política nazi de exterminio y aniquilamiento de los judíos. En el caso de Mennecke busqué un nuevo acercamiento. Era consciente de que estaba proponiendo y esperando un gran esfuerzo de los alumnos, sobre todo en lo que hacía al saber histórico y a un exhaustivo análisis de la personalidad basado en la correspondencia de Mennecke. Después de tantos años de trabajo con adolescentes sabía que los alumnos no siempre están dispuestos a trabajar sobre cuestiones pedagógicas en el contexto de la historia, la sociedad y la política. Al mismo tiempo, mi expectativa era que la temática me permitiera transmitir una noción de lo que fue el programa Operación T4, cuyo objetivo era el "aniquilamiento de la vida inviable".
En el curso de un diálogo preparatorio tuve que comprobar que a diferencia de lo que ocurría con la política de exterminio de los judíos, los alumnos poco o nada sabían del "aniquilamiento de la vida inferior". Algunos se resistieron inicialmente a la temática con ese comentario que bien conocemos los docentes: "de nuevo un tema de la época hitleriana...". Sin embargo, la mayoría se mostró dispuesta a trabajar sobre la tipología del victimario pequeño-burgués que representa Mennecke; tal vez logré convencerlos a través de mis exhaustivas fundamentaciones acerca de la personalidad de Mennecke.
Una y otra vez tuve que transmitir conocimientos históricos, p.ej. en lo que hacía a la posguerra, a la política de los aliados, especialmente de los norteamericanos, quienes durante la "Guerra Fría" habían estado interesados en minimizar la "carga" que suponían para los alemanes los procesos contra los criminales de guerra; el objetivo de esa política era conseguir que los alemanes fueran aliados confiables contra el comunismo y la Unión Soviética.
Los alumnos se interesaron particularmente por el destino de los victimarios después de 1945. Sobre la base de los "procesos contra los médicos" (en los juicios de Nuremberg) y de los procesos de Hadamar, los alumnos se enteraron de que en el período inmediatamente posterior al fin de la guerra, los culpables eran procesados por sus actos y muchos fueron condenados a la horca. A la vez, también tomaron conocimiento de que más adelante, una de las prioridades de la política de posguerra consistió en la "reinserción" de los victimarios en la sociedad de Alemania Federal.
En el curso, escuchamos un programa sobre el tema producido por la Radio del Oeste de Alemania [Westdeutscher Rundfunk], nos informamos sobre el programa de "eutanasia" de los nazis y analizamos la biografía de Mennecke basándonos en la introducción de Peter Chroust a la edición de su correspondencia. En su análisis, los alumnos destacaron el carácter rígido y limitado de este pequeño-burgués, los rasgos patriarcales de su comportamiento y su oportunismo. En las cartas de Mennecke [ver Documentos], y sobre todo en las de su esposa, descubrieron cómo los nazis podían apoyarse en ese tipo de personalidades pequeño-burguesas, de estructura autoritaria, que terminaron constituyendo un pilar fundamental del sistema criminal.
Pude retomar así contenidos tratados con anterioridad en clase: una unidad sobre la personalidad "autoritaria" en la historia alemana desde los tiempos del emperador Guillermo II: el chovinismo, el militarismo, el colonialismo; Alemania como una nación atrasada en lo que hace a tradición y experiencia democráticas; la tradición de la mentalidad de sumisión a la autoridad, analizada sobre la base de la novela de Heinrich Mann "El súbdito" (1914).
Comparamos la biografía de Mennecke con las condiciones de socialización de otros genocidas nazis, como p.ej. los casos de Eichmann y Höss como también los de los cómplices. También discutimos sobre la función de las así llamdas "virtudes primarias y secundarias" burguesas, como la puntualidad, la pulcritud y el orden.
Una vez finalizada la unidad temática, los fragmentos de las cartas de Mennecke formaron parte de los exámenes escritos y orales de bachillerato; los resultados demostraron que los alumnos habían llegado a hacer importantes aprendizajes sobre este capítulo aún no cerrado del pasado alemán.